7 – 4 (Oddí Iroso)



Santos que hablan: Obatalá, Ochún.

Refrán: “Todo lo que brilla no es oro”

Oddun de misticismo.

Oddí Iroso fue mujer de Inle y tuvo una hija bella.

Prohibe cortarse el pelo.

En este oddun nacieron los hemisferios cerebrales.

La persona es favorecida por Olocun.

Dele de comer a la palma.

Debe cumplir con Obatalá.

La persona es autodidacta.

El hijo que nacerá será de suerte para usted.

No deben tratarse locos ni personas enfermas de los nervios.

No brinque mangueras, hay que pisarlas para que no merme su potencia sexual.

La persona es espiritual eminentemente.

Se sufre de insomnio.

Oddun de chismes y calumnias.

Oddí Iroso dice que todo el cuerpo duerme menos la nariz.

Mientras usted duerme su enemigo trabaja.

Haga una investigación espiritual para investigar sobre un espíritu que está pegado a usted y que puede hacer hasta vida sexual con usted.

En este oddun la persona tiene su desajuste síquico que data desde la niñez. Se aconseja a la persona ir a un siquiatra para ir resolviendo los traumas que se padecen.

Este es un  oddun de amarre. Una persona puede trabajarle su pene para que usted no tenga erección con otra mujer.

Hay que cumplir con Obatalá.

La persona debe cuidarse los testículos y el vientre.


No abandone a sus santos.

Changó protege a esta persona. Changó lo crió. Cumpla siempre con Changó.

La persona tiene mucho apego a la vida pero en este oddun se pasa mucho trabajo.

Tenga asiento en la vida para que haya seguridad en sus cosas.

Siga sus costumbres pues tiene un espíritu que le dice las cosas en sueños.

Reciba Olocun.

Cuídese los oídos.

Oddí Iroso es el oído del mar embravecido.

Busque la forma de ir al mar donde este haga un recodo y hable allí con Yemallá y con Olocun mirando al mar y mire al confín para hablar con Obatalá. Trate de ir al atardecer que es el momento propicio en su vida pues es donde ocurre un intercambio entre su yo y sus espíritus.

Mucho cuidado con mantener relaciones con afeminados o mujeres invertidas.

Para que usted pueda mantener su estabilidad en la vida, debe llegar al santo. De lo contrario, usted llegara a la cima pero podrá desplomarse.

Su suerte está en vivir con un hijo de Ochún.

Adore a San Lázaro. Recíbalo.

Póngale pilón a los santos que viven en ellos.

Póngale marfil y pluma de loro a Obatalá.

No sea desobediente.

Pueden acusarlo.

Un mayombero le hace obras malas.

Dele un gallo a Oggún y póngale machete.

Converse con Aggayú y pídale firmeza y bienestar.

Debe saludar el ocaso (atardecer, el color rojo y amarillo que toma el cielo al ponerse el sol pues ese es el color de su alma). Comuníquese con sus espíritus a esa hora, sobre todo para tomar determinaciones.

No se desee la muerte nunca.

Dele una guinea a Changó si usted padece de insomnio.


Use algodón arriba para no recoger malas corrientes.

Este es un oddun de manchas.

Póngale addimuses con frijol de carita a su ángel de la guarda, pero usted no coma frijol de carita.

No sea infiel.

Dele de comer a Eleguá en la basura.

Barra su casa de atrás hacia delante.

Respete a sus mayores y a sus padres.

Vaya al mar y desentierre una tierra madrépora de la arena. Dele coco a ver si ese otá come con usted. Si dice que sí, eche en el hueco ekú, eyá y aguaddó y tape el hueco. Llévese la piedra madrépora para su casa, lávela con omiero de Eleguá y adórela como si fuera un Eleguá. Esto se hace para que no puedan desterrarlo a usted de algún lugar.

Ruéguese la cabeza con lo ritual más osun, obbi, ero y kolá.

En este oddun nació la religión.

La persona se hace rica con sus manos.

Historia de un hombre que siempre imploraba la muerte y un día Ikú se le apareció y éste se asustó y le dijo que él la llamaba pero para ayudarla a cargar la leña.

Historia donde la nariz hizo ebbó y por eso mientras el cuerpo duerme la nariz vela. De ahí que viendo el tigre que no podía apresar el mono se complotó con los demás animales para hacerse el muerto y que se regara la voz hasta oídos del mono. El mono olvidó las desavenencias con el tigre y se presentó en el velorio para rendirle homenaje póstumo al tigre. Al hacer lo que todas las personas hacen cuando llegan a un velorio (asomarse a la caja y verle la cara al difunto) observó que el vientre del tigre se movía inmediatamente supo que estaba respirando y pensó que si respiraba era porque estaba vivo, a lo que el mono reculó y salió corriendo de la funerario pues se dio cuenta de que el tigre le estaba tendiendo una trampa (cuídese de trampas)